Estos 8 datos sobre la conducción bajo los efectos del alcohol le cambiarán la vida

Dato nº 1: Cada 2 minutos alguien resulta herido en un accidente de tráfico.

Según los informes publicados por la Administración Nacional de Seguridad Vial (NHTSA), una persona resulta herida en un accidente de tráfico cada 120 segundos. Además, las estadísticas de la NHTSA de 2016 mostraron que la conducción bajo los efectos del alcohol se cobra unas 29 vidas en Estados Unidos cada día, lo que significa que alguien muere en un accidente de tráfico relacionado con la conducción bajo los efectos del alcohol cada 50 minutos.

Estas cifras deberían ser prueba suficiente de cómo conducir bajo los efectos del alcohol puede aumentar exponencialmente el riesgo de accidentes de tráfico y de tráfico en todo el país, y por eso el gobierno impone leyes y consecuencias estrictas para los delitos de conducción bajo los efectos del alcohol tanto a nivel estatal como federal.

Hecho #2: Incluso un nivel de alcohol en sangre de 0,02 puede perjudicar sus habilidades de conducción.

En la mayoría de los estados, es ilegal conducir un vehículo con una tasa de alcoholemia de 0,08 o superior. Hacerlo resultará en un cargo de DUI si te detienen por sospecha de conducir ebrio.

Pero que conducir con una tasa de alcoholemia de 0,07 o inferior no te meta en problemas con las autoridades no significa que sea seguro.

A partir de una tasa de alcoholemia de 0,08, que se considera legalmente perjudicial, los efectos del alcohol empeoran y pueden incluir: reducción de la coordinación muscular, falta de juicio y autocontrol, escasa concentración y capacidad para procesar información, pérdida de memoria a corto plazo, incapacidad para controlar la velocidad y detectar peligros, y alteraciones de la percepción.

Sin embargo, los estudios demuestran que el alcohol puede empezar a afectar a los sentidos después de un solo trago. Con una tasa de alcoholemia de 0,02, una persona ya puede empezar a mostrar una ligera falta de juicio, una mayor relajación, una disminución de las funciones visuales y una incapacidad para realizar varias tareas a la vez, todo lo cual puede ser peligroso cuando se conduce un vehículo en marcha.

Hecho nº 3: Estados Unidos tiene una POLÍTICA DE NO TOLERANCIA para los conductores menores de 21 años.

La edad legal para el consumo de alcohol en Estados Unidos es de 21 años, lo que significa que los menores de 21 años no tienen derecho a consumir alcohol, y mucho menos a sentarse al volante con una pizca de alcohol en su organismo. Cualquier menor al que se sorprenda conduciendo ebrio puede enfrentarse a graves consecuencias, como fuertes multas, pérdida del carné o penas de cárcel.

Sin embargo, incluso con la política de tolerancia cero al alcohol, aproximadamente el 30% de los accidentes de tráfico mortales en los que se ven implicados adolescentes están relacionados con el alcohol, mucho más que todos los demás incidentes relacionados con las drogas juntos. Más de cuatro mil adolescentes siguen muriendo cada año a causa del consumo de alcohol, y en una cuarta parte de los casos se trata de un conductor ebrio menor de edad.

Hecho #4: Diferentes grados de consecuencias legales esperan a los infractores de DUI.

Conducir ebrio es un delito grave en Estados Unidos, y todos los estados del país tienen sanciones y consecuencias legales para quienes son sorprendidos infringiendo la ley.

Mientras que las primeras infracciones suelen clasificarse como delitos menores, se le puede acusar de un delito grave por reincidencia o si existen factores agravantes en torno a la detención, como lesiones físicas o muerte.

Las penas por DUI pueden variar de un estado a otro y dependiendo de la gravedad del delito. Puede incluir algunos o todos de los siguientes:

• Suspensión del permiso de conducir
• Multas
• Libertad condicional
• Servicio comunitario
• Cárcel

Las penas por un delito grave de DUI pueden implicar miles de dólares en multas y al menos un año de prisión, entre otros. Basta decir; que puede cambiar la vida de una persona para siempre.

Hecho # 5: Usted puede ir a la cárcel, incluso para un delito de DUI por primera vez.

Si piensa que puede librarse fácilmente de una infracción por DUI por primera vez, mejor piénselo de nuevo. Para que no lo olvide, conducir ebrio es considerado un delito grave, lo que significa que incluso su primera violación puede tener graves consecuencias.

Algunos estados ya no piensan que las multas y la libertad condicional son suficientes, y han hecho obligatoria la cárcel para los condenados por DUI por primera vez. Mientras que el término típico de la cárcel es solamente 24 horas a un par de días, ése sigue siendo tiempo pasado detrás de barras. Además, la sentencia puede ser alargada en caso de circunstancias agravantes que están conectados a la acusación de DUI.

Hecho nº 6: La DUI puede hacerle un agujero en el bolsillo.

Una detención por DUI no le saldrá barata. Como mínimo, tendrá que desembolsar unos cuantos miles de dólares por los costes del litigio y las multas, si es condenado. La multa por un delito de DUI puede variar de $ 300 a $ 1800, y eso es sólo para los infractores por primera vez.

La pena es significativamente más alta para los reincidentes y los casos de DUI que resultaron en lesiones o daños a la propiedad. Además, es probable que el tribunal te exija el pago de los daños que el incidente haya causado,

Aparte de las multas y los daños, los infractores de DUI tienen que completar un programa educativo de tres a nueve meses antes de que se les pueda restituir el privilegio de conducir. Estas clases le costarán otros 600 a mil dólares y, si se le da una sentencia de libertad condicional, usted tendrá que pagar por los gastos administrativos de su libertad condicional, también.

Hecho # 7: Un cargo de DUI afecta a algo más que sus antecedentes penales.

Incluso un primer delito de DUI puede ponerle en una desventaja significativa, y no estamos hablando sólo de una mancha en sus antecedentes penales aquí. Un cargo de DUI puede afectar sus oportunidades financieras y de empleo, también.

Para empezar, quienes han sido condenados por conducir ebrios casi siempre tienen que pagar primas de seguro de coche más altas porque las aseguradoras los clasifican como de "alto riesgo". De hecho, la mayoría de los estados exigen una póliza particular a los infractores por conducir bajo los efectos del alcohol: la SR-22, que puede costar dos o tres veces más que su tarifa anterior.

Además, tenga en cuenta que hoy en día los empresarios suelen comprobar los antecedentes penales de los candidatos. Una DUI en su historial podría calificarlo como un riesgo para la seguridad a sus ojos, y esto podría arruinar sus posibilidades de conseguir el trabajo.

La solución a todo esto es sencilla: No bebas y conduzcas.

Pero en caso de que usted se encuentra frente a un cargo de DUI, lo primero que debe hacer es buscar ayuda profesional. Un abogado con experiencia en DUI puede ayudarle a hacer frente a las complejidades de su caso y aumentar sus posibilidades de obtener un veredicto favorable.